Paola Zozaya Saavedra, estudiante de Producción Musical del Tecnológico de Monterrey campus Santa Fe, es creadora y la actual presidenta de Meraki, una fundación que busca fomentar el arte y la cultura con causa social en pro del medio ambiente.
“Somos un grupo de personas que cuestionan, impulsan y revolucionan el pensamiento y el actuar de los mexicanos a través de la cultura.
“Vemos artistas viviendo al máximo su pasión y una sociedad que dignifica y consume arte con causa”, expresó.
De acuerdo con Paola, la fundación tiene como misión apoyar, fomentar y canalizar el arte y a los artistas a través de proyectos enfocados en la agenda 2030, para que la vida en el planeta siga siendo posible.
“Nosotros queremos solucionar estos problemas específicamente en México a través del arte y la cultura resignificando el valor de los artistas en nuestra sociedad”, señaló.
Paola compartió que la idea de esta asociación nació en el año 2017, cuando platicaba con una de sus mejores amigas.
“Me di cuenta que yo quería darles esas oportunidades a las personas que a mi se me arrebataron por cuestiones de dinero, me veía en un lugar lleno de arte, en un lugar donde los poetas podían expresarse de manera libre.
“Donde los músicos grabaran su primera canción y pudieran hacerlo sin que les costara dos meses de trabajo, así fue como la fundación tomó forma”, dijo.
Objetivo: facilitar espacios
Meraki busca proveer de una educación artística de calidad con los estándares internacionales a los que el mundo está acostumbrado.
“Queremos facilitar espacios de representación para artistas inéditos, incitar el pensamiento crítico de la población por medio del arte y la cultura, visibilizar a través del arte distintos problemas proponiendo activamente soluciones en alianza con el sector privado.
“Así cómo proveer de los recursos necesarios para la creación artística de manera competitiva y accesible para el mexicano”, manifestó.
Finalmente, Paola compartió que el trabajo en equipo fue y es muy importante para que la fundación llegara a donde está hoy, para ella las voluntarias, el amor de su familia y su ideal de siempre pensar en grande ha sido el pilar fundamental de Meraki.
La fundación ha llegado a tener presencia en Monterrey, Tampico, Querétaro, Chiapas, Guadalajara y por supuesto la Ciudad de México.
SEGURO QUERRÁS LEER TAMBIÉN: