Los proyectos realizados de producción musical sustentable buscan ser una respuesta a la obsolescencia programada
Recientemente se llevó a cabo el evento Sustentabilísimo, un proyecto realizado por estudiantes de la carrera de Tecnología y Producción Musical de cuarto semestre en el Tecnológico de Monterrey, campus Santa Fe, en colaboración con distintas orquestas sinfónicas juveniles e infantiles de la Ciudad de México.
Las estrellas de este evento fueron alumnas, alumnos, profesoras y profesores de la orquesta sinfónica infantil y juvenil de la alcaldía Álvaro Obregón, a través de la dirección general de cultura, educación y deporte.
Los seis proyectos se realizaron en cinco semanas, productos que junto con retroalimentación y prácticas de producción musical sostenible se están llevando a cabo hoy en día desde sus hogares, con recursos que todos pueden utilizar para hacer sus propias producciones.
“Lo que hicimos estas cinco semanas fue enseñar lo que es una Digital Audio Work Station o DAW, que son los programas que usamos los y las productoras musicales, es nuestra principal herramienta para poder hacer cualquier tipo de proyectos de producción musical”, señaló Sebastian Guerra, estudiante del Tec.
Ausencia
Es un proyecto con el objetivo de transmitir la melancolía que genera el no poder presentarse en un escenario debido a la presente pandemia COVID-19. La pieza expresa el vacío que ha experimentado la industria causado por la situación actual.
“En cuanto a nuestra experiencia en el proyecto, estamos muy agradecidos con los compañeros que nos están ayudando a descubrir estas herramientas nuevas para desarrollar nuestro trabajo como músicos y como maestros también”, expresó el equipo.
Simon´s Cat: Fly Guy
Este equipo creó una instrumentación original apoyándose en los instrumentos virtuales que ofrecen aplicaciones gratuitas como MuseScore y BandLab, además de darle uso al equipo con el que ya contaban. Buscaron escalar más de nivel y crearon folies 100% originales con objetos en casa, para darle un diseño sonoro a la animación Simon's Cat.
“Muchas gracias por invitarnos al proyecto, ha sido un gran aprendizaje para mí, espero poder colaborar con ustedes más adelante. Agradezco mucho a la universidad y al equipo con el que estuvimos trabajando. Ha sido de bastante aprendizaje, muchas gracias y enhorabuena”, dijo Moisés, director de la alcaldía Tláhuac.
Sol-Fi
Su proyecto nació cuando notaron que podían aprovechar cualquier tipo de sonidos de su entorno y utilizarlos como samples en sus composiciones; como resultado final obtuvieron una mezcla de electrónica con elementos sinfónicos sobre una base rítmica con matices de la escena del hip-hop.
La fusión entre el mundo orgánico y el sintético digital les permitió explorar las infinitas posibilidades sonoras.
“El trabajar con una asociación externa a la escuela, nos dio la oportunidad de encontrarnos con un punto de vista creativo distinto. Ahora que finalizamos el proyecto, podemos decir que vivimos una experiencia completa ya que reforzamos conocimientos mediante clases pasadas.
“Ha sido una gran experiencia artística, educativa y sobretodo social en la que todos hemos aprendido un poco más de la música que hacemos y de la importancia del trabajo colaborativo, gracias”, manifestó el equipo.
Flor De Piña: Resignificación
Su proyecto se basa en una mezcla entre la música mexicana y la música contemporánea, específicamente en la electrónica, explorando los diferentes sonidos tradicionales acompañándolos de sintetizadores en un contexto donde la experimentación es su hilo conductor.
Artemio Marínez Montiel, licenciado en Educación Musical por el Conservatorio Nacional de Música y egresado de la carrera de clarinete y saxofón por la Facultad de Música de la UNAM, mencionó que el curso se le hizo fenomenal.
“El ocupar nuevas tecnologías es imprescindible, ya no podemos no tenerlas, esto ha sido muy productivo para mí y es totalmente aplicable en mi trabajo, tanto como de educador musical, como maestro de instrumento y como profesionista”, señaló.
SinfonART
De acuerdo con Osiris Gil, estudiante del Tec, su experiencia con este grupo fue algo muy retador, ya que no tenían idea de cómo iban a trabajar con ellos a distancia ni cómo organizarse.
“Decidimos hacer una mezcla entre una canción tipo balada/rock con temáticas que se pudieran hacer arreglos en orquesta”, dijo.
Evolución
Este equipo decidió crear una composición, la cual representará algunos de sus gustos musicales preferidos, los cuales fueron: Rock, Jazz y Danzón. En esta composición lograron integrar cada uno de los instrumentos que tocan, creando así una obra representativa, única y, sobre todo, de mucho valor.
“La experiencia que tuvimos con los chicos del Tec ha sido muy buena, muy enriquecedora, nos hacen ver otra faceta de la música en la cual también podemos trabajar en esta época de pandemia”, enfatizó Diana Rubio, integrante del proyecto.
Finalmente los estudiantes del Tec se despidieron y expresaron lo que para ellos significó esta experiencia.
“Estamos muy contentos, algo que nos podemos llevar de todos estos grandes proyectos de calidad es que nos sirve de moraleja para decir que no se necesita un equipo de la más alta tecnología, del más alto costo, para crear cosas increíbles.
“Sobre todo en estos momentos de tanta incertidumbre, cuando todos estamos en nuestras casas. Es un paso muy importante para llegar a lo que es la producción musical sostenible y hoy es el momento para crear el cambio”, concluyó Osiris.
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