Ricardo Treviño | Redacción Nacional
En los laboratorios del Tec de Monterrey, estas mujeres han realizado descubrimientos y han sido mentoras de alumnos que están inmersos en la investigación. Fuera de ellos han logrado combinar su profesión con: la pintura, las artes marciales, la cocina o la danza, entre otras.
En entrevista para CONECTA, estas tres investigadoras hablan sobre el balance entre su profesión y actividades artísticas, deportivas o recreativas, en las que pueden explorar sus otros talentos.
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EXPERIMENTA CON TEJIDOS; PRACTICA TAEKWONDO Y TRAPECIO
La doctora Grissel Trujillo encabeza un grupo de investigación de 40 estudiantes en el Centro de Biotecnología FEMSA del Tec de Monterrey campus Monterrey. Su principal objetivo es el desarrollo de tejidos artificiales con técnicas de laboratorio, que podría ayudar a la medicina regenerativa.
Además de su labor docente y como investigadora, la profesora es cinta negra en taekwondo y también practica el trapecio estático.
“Ser una mujer dedicada a la ciencia no está peleado con ser femenina y con tener un equilibrio en la vida".
"Me gusta mucho el trapecio estático: es un deporte que es muy estético y fluido, pero necesitas mucha fuerza, equilibrio y flexibilidad. Es una disciplina muy femenina, pero de mujeres fuertes.
“Ser una mujer dedicada a la ciencia no está peleado con ser femenina y con tener un equilibrio en la vida, en la que puedes dedicarte a hacer un hobbie, tener una relación bonita, estable, una relación con tu familia. Son cosas importantes”, añadió.
Además dijo: “Ee talento en la ciencia no depende del género, pero es cierto que el liderazgo en ciencia en el mundo está ocupado por hombres. Nos estamos perdiendo de una diversidad que necesita la ciencia. Las mujeres podemos ser quizás más empáticas y más sensibles a la belleza”.
Sobre su investigación, señaló que su fin máximo sería en un futuro tener la capacidad de regenerar, algún órgano.
"Construir estos tejidos artificiales a partir de las mismas células del paciente. Es difícil porque su arquitectura es compleja, pero en eso estamos trabajando”, explicó la investigadora.
LUCHA CONTRA EL CÁNCER; BAILE Y COCINA SON SUS "HOBBIES"
Estudiar el cáncer de mama y cómo afecta a las mujeres que lo padecen es el objetivo de la doctora Rocío Ortiz en el Centro de Innovación y Transferencia de TecSalud, y el Centro de Cáncer de Mama del Hospital Zambrano Hellion.
Fuera del laboratorio, el baile y la cocina internacional son sus pasatiempos favoritos, entre otros.
“Me gusta mucho bailar de todo; solo me falta aprender tango. También cocinar con mucho detalle. He tomado clases de cocina, italiana, francesa, argentina, alemana.
"Es una manera de relajarme. Además, me gusta hacer yoga, escuchar música y hacer actividades de ayuda con mis amigas”, dijo.
La especialista en biología molecular cuenta con una trayectoria en la que ha realizado análisis genéticos y genómicos en torno a cáncer de cérvix y de colon, así como de leucemia, entre otros.
Hace dos años la profesora obtuvo la categoría Nivel III en el Sistema Nacional de Investigadores, lo cual considera un logro, pues ha sabido combinar su vida profesional con la personal.
“Como investigadora tengo el nivel máximo ante el Conacyt, esto muchas mujeres lo logran, pero yo casada, con hijos. Fue un reto y lo tengo. Entonces, para mí es un gran honor”, agregó.
"En México (...) todavía no pasamos la parte de mando, pero cada vez hay más investigadoras y probablemente en 5 años va a haber más mujeres que hombres”.
La investigadora, quien ha publicado más de 100 artículos científicos y ha sido citada más de 3 mil 900 veces por otros colegas, disfruta sus tiempos libres en compañía de su esposo y sus tres hijos, o en actividades que la complementan.
"En México (...) todavía no pasamos la parte de mando, pero cada vez hay más investigadoras y probablemente en 5 años va a haber más mujeres que hombres”. añadió.
INVESTIGA LA SANGRE PARA MEJORAR DIAGNÓSTICOS; PINTA, BAILA Y ESCRIBE
Aprovechando las bondades de la tecnología, la profesora investigadora del Tec, Samira Hosseini, busca mejorar las plataformas existentes para la detección oportuna de enfermedades a través de la sangre.
Para tener una vida integral, Hosseini dijo que explora su lado artístico, realizando actividades como bailar tango, pintura y escritura, las que ha exhibido en galerías o publicado en libros.
“Puedes explorar otros sentimientos, otras habilidades. Te desconecta del trabajo y eso sirve para la meditación. Tu cerebro puede descansar y estar fresco y rendir mucho mejor para el trabajo”, comentó la profesora iraní.
“Yo practico tango, me da fuerza emocional y puedo tocar mi lado femenino. También hago pintura; encuentro una energía completa que viene a mí a través de mis obras. Al pintar mi trabajo en la investigación me inspira a crear obras y viceversa”.
La especialista en biotecnología, quien es directora de Writing Labs del Tec, platicó a CONECTA que su trabajo se enfoca en la fabricación de un dispositivo que combina la ingeniería médica y biosensores.
“Las plataformas que hay actualmente no son perfectas. Estamos tratando de resolver los problemas y sus limitantes; con un dispositivo podemos detectar enfermedades infecciosas, dengue o diferentes tipos de cáncer”, explicó.
“Estamos en el siglo 21. Tenemos que crecer y madurar (como sociedad), no podemos pensar que las mujeres tienen menos capacidades. ¡Claro que no! Tenemos las mismas capacidades".
“Es construir la siguiente generación de estas plataformas para que los laboratorios y los especialistas tengan una opción más rápida y con resultados más acertados a la hora de analizar la sangre de los pacientes”.
La profesora opinó que en la ciencia, hombres y mujeres deben tener las mismas oportunidades para hacer investigación.
“Estamos en el siglo 21. Tenemos que crecer y madurar (como sociedad), no podemos pensar que las mujeres tienen menos capacidades. ¡Claro que no! Tenemos las mismas capacidades.
“Somos diferentes (mujeres y hombres), pero eso nos complementa para hacer juntos una diferencia para la humanidad. Hay que destruir las barreras, esa ilusión de que no somos iguales o suficientemente buenas”.
La profesora reveló que junto a otros investigadores impulsa una iniciativa en el Tec que tendrá la intención de involucrar a cada vez más estudiantes femeninas a la ciencia.
“Es exponer a las mujeres jóvenes a que aprendan cualquier disciplina, a que vivan sus capacidades y que puedan dedicarse a ser lo que quieran”, expresó.
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