Campus Irapuato fue la sede del torneo de robótica KineTEC, donde alumnos de diversas escuelas compitieron en una carrera contra el tiempo para armar un robot.
KineTEC fue organizado por la escuela de Ingeniería y Ciencias de Irapuato, bajo el mando del profesor de Ingeniería Iván Fernando Hernández Araujo, y apoyado por alumnos del tópico de Ingeniería.
“Se piensa que es (la ingeniería) muy complicada [...] que la física y las matemáticas no tienen aplicaciones, pero cuando lo ves en acción, eso cambia”. - Iván Hernández
Participaron alumnos de PrepaTec Irapuato, Kipling, CONALEP, Instituto Novaera, Colegio Pedro Martínez Vázquez y Colegio Marcelino Champagnat.
¿Un preview de futuros ingenieros?
Se otorgaron menciones verbales, reconocimientos y premios al podio de la competencia, para reconocer el esfuerzo, habilidad y colaboración de los mejores equipos.
El equipo del Colegio Kipling, conformado por Alejandro Araiza, Roberto Yépiz y Leonardo Negrete se llevó el primer lugar tras presentar un robot con casi completado que cumplía con las características requeridas.
El segundo lugar lo consiguió el equipo del colegio Pedro Martínez, mientras que el bronce fue para el Instituto Novaera.
Despertando el interés de las nuevas generaciones
Iván Hernández explicó en entrevista que “El objetivo de KineTEC es que los alumnos puedan vivir lo que son las ingenierías de una manera aplicada”.
La competencia tenía la intención de demostrar la física y las matemáticas aplicadas de forma real, y atraer hacia el campo de la ingeniería a las nuevas generaciones.
“Esa es la idea [...] despertar las ingenierías aquí en Irapuato”- Iván Hernández
Construcción bajo presión
Los equipos participantes (nueve en total) estaban conformados por tres integrantes, y a cada equipo se les dio un kit de robot, pegamento, palillos para usar como ejes, tijeras, y un motor, además de algunas herramientas como martillos, pinzas y un soldador.
El robot que debía armar cada equipo era una “araña” de cuatro patas, que utilizaba el método Theo Jansen, que simula el movimiento de una pata de un animal, para desplazarse. Curiosamente, las arañas no se programan, solo utilizan un motor para propulsarse.
Utilizando solamente los materiales proveídos y un instructivo, los equipos disponían solamente de dos horas para transformar decenas de piezas de madera y pegamento en un robot funcional.
Aún así, varios de los competidores demostraron que estaban a la altura de la tarea y lograron completar gran parte de sus robots.
Los robots fueron calificados por un jurado siguiendo una rúbrica.
Grandes aprendizajes y detalles del porvenir
Iván Hernández comentó en entrevista que disfrutó mucho el evento, y que varios de los competidores, invitados y miembros de staff opinaron lo mismo.
Este es el primer concurso de su tipo en PrepaTec Irapuato, y el profesor Iván está esperando que se pueda hacer una segunda competencia el próximo año con un robot distinto.
Los competidores desarrollaron varias habilidades, como trabajo en equipo, aprender a organizarse y ser eficientes con el tiempo.
Además, el pensamiento secuencial, saber seguir instrucciones e inteligencia espacial fueron también factores clave que los competidores tuvieron que adquirir y aplicar.
El torneo tomo lugar en el CCyC, durante el 6 de noviembre de 10:00 a 12:00.
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