Lorena Mojica | Campus Ciudad Juárez
Un joven carismático, deportista y de valores muy arraigados, así es Raymundo Garza Vargas, estudiante de tercer semestre en Trayectoria de Negocios en Campus Ciudad Juárez y reconocido judoca a nivel nacional. Comenzó su carrera deportiva cuando tenía 5 años de edad, inspirado por su padre que practicaba esta disciplina cuando joven, esto llamó su atención y comenzó a entrenar lo que propició que le tomara gusto y cariño a esta actividad.
Cuando es tiempo de competencias, es muy disciplinado y cuida mucho lo que come ya que debe cumplir con un peso específico según la categoría. “Cuando voy a pelear a un peso más bajo de lo que peso normalmente, el régimen sí es muy estricto”, comenta. “Siempre practicar algún deporte o disciplina es sacrificar muchas cosas y requiere tener mucha fuerza de voluntad."
Desde muy pequeño comenzó a sobresalir en el deporte. “A mi papá siempre le ha gustado verme competir”, comentó cuando se le preguntó cuál ha sido su satisfacción más grande en lo deportivo. “Cuando gano, ver a mi papá contento y orgulloso de mí, es una sensación muy bonita”.
Cuando estuvo en la preparatoria, comenzaron entre un amigo y él un equipo de football americano ya que es un apasionado del deporte y la actividad física. Una vez que se graduó y entró a la Trayectoria de Negocios, continuó con su entrenamiento de football fuera del campus, pero continuó practicando judo, incluso dando una clase co-curricular en el campus.
“Se busca el balance, toda la vida he entrenado en la tarde o en la noche. Los fines de semana los tengo regularmente libres”, dijo tratando de ilustrar cómo es que logra combinar el deporte, sobre todo una disciplina tan exigente, con sus otras responsabilidades. “Gracias al judo he podido viajar a muchas partes de México y a algunos otros países. He sido campeón nacional en dos ocasiones”, compartió.
Ha participado en competencias nacionales e internacionales tales como los Juegos Panamericanos 2009 en Brasil y en el US Open 2014 en Fort Lauderdale, Florida como representante de México. Cuando participó en los Panamericanos, lo invitaron a pasar un tiempo en el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR).
Desde que entró a la preparatoria, se le ofreció una beca deportiva, por lo que siente un compromiso muy grande con el deporte y la escuela, “El trabajo que haces se ve reflejado en cada medalla”.