Adriana Lorena Avitia | Campus Chihuahua
Alumnos del Tec de Monterrey campus Chihuahua, tuvieron una plática con el presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, José Luis Armendáriz, donde expuso la situación actual de los derechos humanos.
“Los derechos humanos son la espada y escudo de la autorrealización y el medio para alcanzar la felicidad de nuestra sociedad”, así comenzó la charla José Luis Armendáriz sobre cómo el estado grande de la república ha luchado por establecer un respeto por los derechos humanos desde sus inicios.
Desde la aparición de la Declaración de los Derechos Humanos el 10 de diciembre de 1948 y la apertura de las comisiones que defienden estos derechos en 1990, el estigma que presenta este tema es en su mayoría, que defienden a los delincuentes, compartió el experto.
Explicó que en la actualidad tenemos la facilidad de hacer un cambio en la percepción de este tema a través de las redes sociales y los medios de comunicación masiva, quienes se han vuelto aliados en la brigada contra la ignorancia y la apatía por las situaciones que suceden a nuestro alrededor.
Al ser Chihuahua uno de los primeros estados en el país en crear una comisión especializada en la observación, protección y supervisión de la aplicación de los derechos humanos en diciembre de 1990, la comisión buscó el humanizar a las personas, sus acciones y pensamientos en base a la dignidad humana que todos poseemos.
La plática incluyó un viaje por la historia de los derechos quebrantados por la comunidad chihuahuense y como día con día nos enfrentamos a la lucha por mejorar nuestro respeto, tolerancia e igualdad.
El representa de los derechos humanos, instó a los jóvenes presentes a luchar por la protección de todas las personas sin importar su creencia, situación socioeconómica, color de piel, y a no dejarse convencer por la lucha política sobre de qué lado se encuentran los derechos humanos.
¿Qué podemos hacer nosotros?, es la pregunto que muchos de los presentes se hicieron, a lo que José Luis Armendáriz dijo que el reto de todo es pasar de una vigencia de leyes y letras escritas en actas que muchas personas no han visto, a una vivencia día con día de los derechos.
“La herramienta principal que debemos usar para difundir el respeto y la denuncia a cualquier trato injusto e inhumano está en la educación”, afirmó, pues es la mejor garantía para la igualdad de oportunidades y de conocimiento, estudio e información que podemos obtener y difundir.
Por último, el licenciado mencionó que es nuestro deber como ciudadanos, de una sociedad que busca la igualdad, el no enfocarnos en movimientos o creencias sino en la persona y su dignidad como centro y utilizar las leyes y derecho para defenderlo, proponer y lograr una construcción social a base de una educación completa y digna para todos.