Max Rullán fue fichado por Bravos FC y se transfirió al Tec campus Ciudad Juárez para titularse de una carrera de negocios
Max Rullán ha tenido un camino marcado por decisiones que conectan el deporte con los estudios. Hoy, está cerca de debutar en primera división mientras estudia su carrera profesional en el Tec.
En 2023, el fichaje por Bravos FC cambió su rumbo: se mudó de Ciudad de México a Ciudad Juárez y decidió continuar sus estudios universitarios en el Tec de Monterrey campus Ciudad Juárez.
Su día a día se vive entre la cancha y el aula. Estudia la Licenciatura en Estrategia y Transformación de Negocios (LAET) y entrena con Bravos.
Así, confesó que el campus se convirtió no solo en su nueva escuela, sino en el espacio donde organiza su agenda para cumplir sus objetivos.
“Académicamente quiero graduarme y conseguir ese título y hablando de futbol consolidarme en primera divisón”.
Entre el balón y el aula: la vida en el Tec y un equipo profesional de futbol
Los objetivos a corto y largo plazo de Max son terminar su carrera universitaria, debutar y consolidarse en la primera división del futbol mexicano.
“Académicamente es graduarme y conseguir ese título. Profesionalmente, hablando en el futbol, es consolidarme en primera división y seguir aportando en el futbol mexicano”.
Para conseguirlo, al ser fichado por Bravos FC, decidió pedir su transferencia al campus Ciudad Juárez del Tecnológico de Monterrey.
“Lo que me motivó a dejar la Ciudad de México y llegar al campus Ciudad Juárez del Tec de Monterrey fue haber sido fichado por Bravos FC”.
Desde entonces, ha buscado mantener el equilibrio entre lo académico y lo deportivo, señalando que siempre ha sabido organizar sus tiempos.
Para Max, el cambio de ciudad representó el reto de adaptarse a un nuevo entorno, pero compartió que también le trajo oportunidades para establecer nuevas relaciones.
Durante este proceso, Max contó con acompañamiento institucional para hacer realidad su traspaso de campus, todo mientras competía en la Sub-23 del futbol mexicano y se consagró subcampeón ante Toluca FC junto a su equipo.
“Haber estudiado en otro campus que la verdad nunca hubiera pensado estudiar ahí me abrió las puertas de muchos más amigos y gente conocida que al final acabé queriendo mucho”.
Así, Max reconoce que esta etapa le ha dado aprendizajes tanto a nivel profesional como personal. Hasta ahora, comenta, valora las relaciones que ha formado y el crecimiento que ha experimentado en el entorno académico y el deporte competitivo.
Por ahora, la vida de Max Rullán se halla entre la carrera de LAET en el Tec, que él dice brinda todos los principios de los negocios, y un último paso antes de la primera división mexicana, la Sub-23 con Bravos FC.
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