El EXATEC Ulises González comparte su llegada a la renombrada empresa de Elon Musk y el trabajo que ha realizado para cumplir sus metas profesionales.
“Comencé a aplicar en el 2012, lo hacía unas tres o cuatro veces al año para distintos puestos. En total, fueron más de 600 veces las que apliqué durante siete años a alguna posición en la empresa”.
Así relata el EXATEC Ulises González su llegada al trabajo que vislumbró desde que estaba en una clase de orientación en la Secundaria Tec.
Y es que la disciplina, pasión y perseverancia, son las bases que llevaron al egresado del Tecnológico de Monterrey campus Laguna a conseguir sus metas y ahora desempeñarse como Líder de Ingenieros de Procesos en la empresa de automóviles eléctricos Tesla.
Ulises comparte en CONECTA su formación en el Tec y cómo esta le ayudo a ir escalando profesionalmente hasta llegar a su principal meta.
El camino hacia Tesla
Su aspiración siempre fue clara, él quería trabajar para una empresa grande e internacional.
Su desarrollo profesional comenzó antes de graduarse, cuando pudo realizar sus prácticas en la empresa de moldeo Cableados del Norte y a dos meses de egresar, su formación y experiencia, le permitieron mudarse a Reynosa para laborar en LG Electronics cómo Ingeniero de procesos.
“Apliqué a muchos trabajos desde antes de graduarme y cuando me llegó la oferta de trabajar en una empresa grande cómo LG, no pude rechazar la oferta y me mudé a Reynosa”.
Después de tres años, decidió que era momento de estudiar una maestría que le ayudara a mejorar su conocimiento profesional y en ese momento decidió laborar en la compañía Corning.
Gracias a su proactividad, la empresa Corning le dio la flexibilidad de trabajar a su tiempo y logró completar su Maestría en Ingeniería.
“Para las empresas, es importante que seas una persona autosuficiente. Tanto para Corning cómo para Tesla, no he tenido un horario de asistencia, me evalúan bajo métricas”.
Su llegada a la Giga-Factory 1 de Tesla
Ulises aplicó a Tesla desde su graduación en el año 2012 y durante siete años, no recibió respuesta alguna.
“Mi meta era llamar la atención de un reclutador para usar mis habilidades de convencimiento y lograr conseguir una entrevista para algún puesto”, recordó.
No fue hasta junio de 2019, que Ulises logró conseguir el interés de un reclutador de Tesla para iniciar su proceso de aplicación con su primera entrevista.
“Estaba bien nervioso, fue el primer filtro y a partir de ahí tuve aproximadamente veinte entrevistas individuales con diferentes personas”.
Al finalizar el proceso Ulises no consiguió la vacante, sin embargo, su reclutador lo recomendó hacía otra posición dentro de la empresa donde su perfil encajaba mejor.
“El mismo reclutador me dijo que, aunque no quedé en la posición, dejé una buena impresión en mis entrevistadores y estaba convencidos de que podía ser un buen elemento para la empresa”.
"Para destacar cómo profesionista debes desafíar lo común y si te dicen que algo no es posible, busca cómo hacerlo".
Tuvo aproximadamente, otras veinte entrevistas para la posición actual que ocupa y en febrero de 2020 le invitaron a conocer la Giga-Factory 1 de Tesla.
“Ellos me pagaron los gastos del viaje y conocí toda la planta. Cuando regresé a Reynosa no podía dejar de pensar, ‘wow, esto es lo que siempre había querido’”.
Llegó junio y su oferta laboral estaba lista, Tesla se comunicó con Ulises y le informaron que estaban listos para recibirlo.
Tuvo que arreglar su visa y organizar su transferencia y después de un año y medio, finalmente estaba pisando la planta de Tesla como ingeniero.
“Creo que sin todas mis experiencias cómo LG, Corning y mi maestría, no hubiera logrado llegar hasta aquí”.
“Mamá, esto es lo que quiero estudiar”
Su historia comenzó en Secundaria Tec, cuando un ingeniero mecatrónico brindó a su clase una plática de orientación vocacional.
“El ingeniero presentó en su exposición robots, aeronaves, helicopteros y celulares. Tenía todo lo que a mi me gustaba, y él decía que todo tenía un componente electrónico y mecánico, la Mecotrónica era la unión de todo”.
Esa misma tarde, Ulises le informó a su madre que se convertiría en Ingeniero en Mecatrónica.
Ulises fue alumno del Tec campus Laguna desde secundaria hasta maestría. Para él, ser un Borrego es un orgullo que lleva a todas partes.
“Me da mucho orgullo mi alma mater. El que sea una de las mejores universidades del mundo te abre muchas puertas y siempre pienso en cómo mi trabajo tiene la responsabilidad de representar al Tec”.
Ulises destaca la formación integral del Tec que pudo disfrutar al participar en los equipo de natación, y música, además de grupos estudiantiles, todo esto le permitió desarrollar competencias como la autogestión que hasta el momento es de gran utilidad para su trabajo.
“Lo que me dejó el Tec aparte de lo técnico, fue lo importante que es desarrollar la proactividad y entendimiento de cómo liderar a otros, parte crucial para formar parte de un equipo”.
Mi mamá hizo que yo entrara al Tec en secundaria, pero una vez que entré, decidí quedarme ahí en prepa, carrera y mi maestría.
“Siempre debes tener metas locas y llegar al próximo objetivo”
Si bien Ulises ya está dentro de la empresa, aún no se encuentra conforme, pues se quiere seguir retando a romper más récords de producción e impedimentos preestablecidos.
“Siempre debes tener metas locas y pensar: ¿Quién dice que no se puede hacer eso? Quiero seguir mejorando mi trabajo para llegar hacia mi próximo objetivo”.
A los lectores de CONECTA y a aquellos estudiantes del Tec que aún están por egresar, Ulises recomienda varios puntos que asegura los llevarán a complir sus metas profesionales.
“Perseverancia, aprender todo lo posible, incluso en algún trabajo que no sea el que más te llene profesionalmente, salir de las zonas de confort, contar con un mentor y seguir preparándose”.
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