Conoce cómo es que las alumnas y maestras de PrepaTec Sonora Norte y Cd. Obregón vivieron la actividad colaborativa de danza contemporánea.
Para romper con las clases cotidianas de danza contemporánea, las maestras de PrepaTec Sonora Norte y PrepaTec Cd. Obregón intercambiaron a sus grupos de danza por una clase.
Este cambio de maestras tuvo una aceptación increíble por parte de las alumnas de ambas clases.
El objetivo de la actividad es compartir experiencia y conocimiento de los maestros del área de arte y cultura, propiciando un espacio de convivencia y aprendizaje al mismo tiempo.
“Todos pudimos conectar de una manera muy bonita porque la danza nos une” exclamó Sara Parada, alumna de danza contemporánea de Cd. Obregón.
Aprovechando las oportunidades que brindan las clases en línea por la pandemia, la actividad colaborativa de danza tuvo como propósito la convivencia entre jóvenes de distintos campus.
Detrás del escenario: las maestras
La maestra de danza del campus Cd. Obregón es Ruby Acosta, quién comenzó a trabajar como maestra en el Tec a partir de febrero del 2020.
Ruby comenta que fue un reto, ya que impartió muy pocas clases presenciales. No obstante, está muy agradecida por pertenecer a LiFE y gozar de dinámicas como esta.
“Sé que mi labor dentro del Tec es sumamente valiosa y mi aportación a mis alumnas será algo que llevarán y recordarán siempre. No solo a nivel técnico, sino humano” afirmó Ruby.
Además, sus técnicas favoritas son la danza contemporánea, composición coreográfica y jazz contemporáneo.
Por otro lado, la maestra de danza del campus Sonora Norte es Luisa Baez. Pertenece a la comunidad Tec desde hace aproximadamente dos años y medio.
Baez menciona que lo que más le gusta de ser maestra en el Tec es la capacidad de poder trabajar con un grupo de calidad y nivel, además la inspiran a ser mejor maestra y bailarina.
“Siento que cumplimos con una de las principales funciones del arte que es conectar y compartir” añadió Luisa.
¡Es hoy! ¡Es hoy!
La primera clase fue impartida por la maestra Luisa, donde alumnas de Cd. Obregón y Sonora Norte ingresaron a su sesión de zoom.
Baez resaltó que no hubo obstáculos dentro de su clase, y considera que todo fluyó correctamente.
“Muy orgánica y natural la convivencia, no fue nada forzada. Se logró el objetivo” expresó Luisa.
Además, destaca cómo fue la convivencia entre las alumnas de Cd. Obregón, y comparte sus primeras impresiones.
“Había muy buena disposición y compromiso en el grupo, muy profesionales con la clase intentaron divertirse mientras aprendían” complementó.
Luisa Baez mencionó que su parte favorita de esta dinámica fue un ejercicio de exploración e improvisación contemporánea, donde se pudo percatar de las variantes, estilo y esencia de cada alumna.
Una segunda clase para brillar
La segunda clase fue impartida por Ruby Acosta, donde ella fue la encargada de enseñar a las alumnas de ambos campus.
Ruby destacó que la convivencia fue amable, de respeto y apoyo. Comentó que la emoción traspasaba la pantalla, y que es una actividad que anhela que se pueda realizar de manera presencial.
“Considero que, este movimiento de unir lazos y acercar a un campus cercano; nos permite abrir nuestro panorama como familia Tec. Nos lleva a sumar, unir, desarrollar, proyectar talentos entre todos los que somos parte” exclamó.
Además, Acosta compartió lo que más le gustó del grupo de las niñas del campus Sonora Norte:
“La disposición, su entrega, pasión y escucha en la clase. Su seguridad con la que enfrentan los retos” comentó.
Agregando que lo que más disfrutó de la dinámica fue ver las caras de los estudiantes.
“Tenían cara de nervios, entre alegría e incertidumbre a lo desconocido, pero mientras el tiempo de la clase paso ya, estaban más relajados” complemento.
El aprendizaje final
Ambas maestras gozaron de la actividad colaborativa, ya que ambas vieron la oportunidad como una manera de crecer por dentro como bailarinas.
Ruby afirmó que en toda profesión es necesario ver más allá de lo que se hace en lo cotidiano, a lo que muchas veces le quitamos ese asombro.
“Al expandirse y reconocer al otro, las posibilidades aumentan y nos vemos en el otro como parte de este crecimiento artístico. Nos genera valor, empatía y surgen nuevos sueños y motivaciones” exclamó Acosta.
Sara Parada, alumna de Cd. Obregón, comparte su punto de vista acerca de la dinámica de danza:
“Cada clase nos enriquece como bailarines. Fue una oportunidad muy bonita de conocer y conectar con gente que le apasiona lo mismo que a mí”.
Por último, la maestra Ruby Acosta comparte un mensaje para motivar a todos los maestros de LiFE acerca de crear actividades entre distintos campus.
“Sus alumnos serán otros después de ese encuentro. La experiencia misma será el logro y la escuela que ellos valorarán. Se abrirá una nueva perspectiva de su quehacer. Todos ganamos con estos encuentros” concluyó.
Las clases de danza se impartieron los días 28 de septiembre y 5 de octubre del 2020 bajo como parte de LiFE@hHome.
LiFE@Home, es una adaptación de Liderazgo y Formación Estudiantil (LiFE) al entorno no presencial en donde encontrarás una selección de más de mil 200 actividades.
Este programa es parte del HyFlex+ Tec que el Tec puso en marcha ante la contingencia del COVID-19 para velar por la salud de su comunidad, y asegurar su continuidad académica y formativa.
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