Conocer herramientas para la inclusión de mujeres en la política fue la meta del taller de la politóloga, Flavia Freidenberg, durante su visita al Tec Guadalajara.
En especial, sus recomendaciones fueron en referencia a la inclusión de las mujeres dentro de los sistemas electorales latinoamericanos.
Esto, en el marco del Décimo Congreso de LRI del Tec Guadalajara con el título: Un País para Todas, realizado el pasado noviembre.
Durante su ponencia ante estudiantes la experta compartió 7 acciones que pueden reducir la brecha de género en la región latinoamericana en materia de política:
1. Innovación política.- Implementar mecanismos de prácticas, intervenciones o regulaciones innovadoras para generar un cambio positivo con impacto político,
2. Reglas electorales fuertes.- Fortalecer los sistemas electorales de género para garantizar mayor representación para las mujeres,
3. Erradicar violencia política por razón de género.- Terminar acciones u omisiones que afectan derechos políticos contra las mujeres por la simple razón de ser ellas,
4. Cambiar el relato.- Transformar la narrativa desarrollada desde la lógica de los roles de género,
5. Democratizar partidos e instituciones.- Hacer más inclusivas y representativas las instituciones democráticas, en especial los partidos políticos,
6. Movilización.- Usar redes sociales y plataformas digitales para establecer formas disruptivas para ser parte del impulso a estas iniciativas y
7. Generar más pedagogía.- Educar a la sociedad en general.sobre la diversidad, inclusión e igualdad en el ámbito político, en los medios y en el electorado.
La politóloga comentó que es necesario implementar las recomendaciones sobre violencia de género emitidas internacionalmente.
En especial a los de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés).
Resaltó que pese a que las leyes son clave, el sistema electoral requiere de representación sustantiva para garantizar igualdad.
Por ello, recomendó lo que llama romper los techos: es decir, erradicar sesgos de género, estereotipos y “laberintos” de poder.
Y a su vez, sugirió favorecer la independencia económica y social de las mujeres que participan en política latinoamericana.
Finalmente, aclaró la experta, “la meta del feminismo no es la equidad, sino la igualdad sustantiva”.
Además de estas acciones específicas, Freidenberg, enumeró las formas en las que reproduce la violencia política hacia las mujeres:
- Violencia física (secuestros, golpes, amenazas),
- No otorgar financiamiento para sus campañas,
- Ceder o asignar los distritos “perdedores”,
- Perpetuar estereotipos de género y
- Limitar acceso a recursos para ejercer el cargo.
Para Silvia Figueroa, Decana Región Occidente de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tec, “este espacio de diálogo responde al llamado de Naciones Unidas...
Con la intención de "generar el diálogo que permita pensar en estrategias para la igualdad e innovar para el cambio”, argumentó.
Destacó que es necesaria esta reflexión sobre “las herramientas de inclusión, perspectiva de género en diferentes ámbitos y activismo, bajo el paraguas de los Derechos Humanos”.
Al respecto, Mariana Lazos, alumna de quinto semestre de Relaciones Internacionales (LRI) y presidenta del Comité Organizador del congreso, comentó:
“Decidimos analizar los obstáculos y retos para que en el país exista igualdad sustantiva, para encontrar justicia para hombres y mujeres por igual”.
La visita de Freidenberg, en el Décimo Congreso de LRI del Tec Guadalajara llevó por título: Un País para Todas. Se llevó a cabo los pasados 5 y 6 de noviembre.
Y abordó la situación política, económica y social de la mujer en México y el mundo.
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