Líderes transformarán el servicio social

Universidades, empresas, organizaciones de la sociedad civil y gobierno se han unido con un solo fin: transformar el servicio social y generar proyectos de impacto que beneficien a la sociedad y den un gran aprendizaje a los alumnos.

En el lanzamiento de Yo decido actuar: innovación en el servicio social universitario, esfuerzo del Tec de Monterrey acompañado por el Instituto Nuevo Amanecer, la Fundación FRISA y otros aliados, se invitó a representantes de diversas instituciones a trabajar en conjunto en crear proyectos de impacto en la comunidad.

Esto con el fin de que los alumnos sientan que sus horas invertidas en realidad beneficien a personas y que hayan utilizado los conocimientos adquiridos en sus estudios, manifestó Ernesto Benavides, director de Servicio Social en el campus Monterrey.

Para las asociaciones civiles, el contar con alumnos es indispensable si se sabe aprovecharlos, ya que son quienes buscan crear soluciones innovadoras a los problemas que se enfrentan, destacó Alicia Navarro, directora del Instituto Nuevo Amanecer.

Nuevo Amanecer se dedica a mejorar la calidad de vida de niños y jóvenes con parálisis cerebral hasta su edad adulta.

En el caso de las empresas, lo que se busca es que sus donativos a las asociaciones civiles generen acciones que transformen para bien a la sociedad, manifestó Carmen Garza T. junco, directora de la Fundación FRISA.

Por esta razón, sus donativos se han transformado en inversiones en los proyectos seleccionados, los cuales se busca tengan impacto directo tanto en alumnos, organizaciones y las empresas mismas.

En el desayuno realizado, los alrededor de 75 líderes sociales asistentes dialogaron sobre las fortalezas y retos del servicio social actual, y coincidieron en que se debe dar mayor seguimiento a los proyectos en cuanto a su duración y colaborar más entre instituciones.

El diálogo entre asistentes, de acuerdo a los organizadores, derivó en aportaciones de gran valor social, tales como:

• El servicio social debe ser para el estudiante una experiencia altamente retadora de formación profesional y de sensibilización de la realidad social, en la que, además de ser un proyecto retador, el resultado obtenido debe dejar un impacto positivo reflejado en la disminución o solución de problemáticas sociales.
• Los estudiantes de servicio social son personas clave para las organizaciones al sumarse a apoyar sus causas, otorgando su visión joven, energía, creatividad, talentos y conocimiento sobre innovaciones tecnológicas y digitales.
• La universidad es un habilitador de alianzas y trabajo interinstitucional multidisciplinario en el cual el servicio social debe ser incluido como elemento clave.
• El servicio social bajo el esquema actual está rebasado y obsoleto, requiere de una renovación y la convocatoria “Yo decido actuar” apunta a que puede ser una alternativa para lograrlo.
• Los proyectos de Servicio Social Universitario deben contar con el soporte e involucramiento de otras áreas de la propia universidad; un buen servicio social no es posible desplegarlo con el sólo involucramiento de las oficinas de servicio social.
• Las universidades deben hacer cambios disruptivos para incrementar la calidad del servicio social, deben abrir nuevos espacios curriculares que faciliten el acompañamiento de profesores a los alumnos y colaborar con aportaciones especificas a los proyectos dentro de sus instalaciones; los socios formadores son ambos: organizaciones y universidades, y deben invertir por igual.
• Las instituciones de la sociedad civil organizada deben renovarse en materia de programas de servicio social; está acabado el tiempo de verlos como mano de obra de bajo costo.
• Se resaltó la importancia de plantear disrupciones en el servicio social universitario: cambiar el paradigma de realizar donaciones para adentrase en la inversión de recursos con métricas que permitan evaluar el impacto en la sociedad.
• Debe haber mejoras incrementales en las prácticas de planeación, sostenibilidad y continuidad de los proyectos de servicio social; se requieren proyectos de largo plazo que permita al estudiante participar en una misma causa desde distintas ópticas y experiencias.
• Se identificó la necesidad de crear un ecosistema tecnológico tipo plataforma de interacción para conectar a todos los involucrados en los programas y causas de servicio social.

Benavides señaló que el siguiente paso es analizar las propuestas que han recibido para poder llegar a un diseño en el que se apliquen los diferentes lineamientos que han establecido.

“Tenemos ya muy claro hacia dónde queremos apuntar. Estamos recibiendo muchas aplicaciones en la convocatoria.

"Sigue conformar el comité evaluador de esas propuestas y de las propuestas que salgan lo que sigue es cómo las vamos echar a andar”, explicó Benavides.

Esto se realizará después de que termine la convocatoria de Yo decido actuar, el 29 de noviembre, y se espera que para enero del siguiente año se lance por lo menos un proyecto derivado de este esfuerzo, apuntó Benavides.