Rebeca Hernández, egresada del Tec de Monterrey campus Tampico, actualmente está desarrollando un proyecto para la limpieza espacial
Rebeca Hernández, egresada del Tec de Monterrey campus Tampico de la carrera de Mecatrónica, actualmente está desarrollando un proyecto para la limpieza espacial.
Este proyecto propone desarrollar soluciones para remover cúmulos de basura que están fuera de la tierra. Rebeca explica que “En la ingeniería, hay opciones para todo y para todos: investigación, mano de obra, docencia, etc.” y para ella, su pasión es la investigación lo que la llevó a desarrollar este proyecto.
Rebeca comparte que su amor por el estudio la llevó a la búsqueda de proyectos internacionales acerca de la basura espacial. Pronto descubrió que no había ninguno que fuera lo suficientemente preciso para removerla de manera rápida y segura. Entonces pensó “¿Por qué no crear uno? " ¡Y se puso manos a la obra!
La ingeniera tuvo la oportunidad de ir a la Tokyo Metropolitan University en el departamento de aeronáutica y astronáutica, para enfocarse en la automatización y proyectos de investigación espacial. Aunado a ello, estudia una maestría en ingeniería y ciencias. Todo ello derivó en el desarrollo de su tésis en la basura espacial.
Proyecto para remover la basura en el espacio.
La basura espacial requiere de una solución. El proyecto de Rebeca propone la remoción activa de objetos inservibles que están en el espacio. Lo cual significa, remover la basura espacial sin desechar aquellos objetos que sí funcionan (como satélites de servicios o de telecomunicaciones).
La remoción de basura se puede dar a través de métodos rígidos o flexibles. El proyecto de la alumna se basa en los flexibles, usando los grippers y harpones. Además, propone utilizar giroscopios para hacer cálculos más precisos al trazar las órbitas para la recolección de basura.
Los grippers y harpones son mecanismos que se vuelven una extensión del satélite para remover la basura de manera más precisa. Son como las “muñecas” del brazo mecánico. Mientras que los giroscopios controlan la orientación de dichos aparatos.
El proyecto lleva dos años de trabajo, iniciando desde la universidad. En el último semestre de su carrera empezó a trabajar con el giroscopio en el diseño mecánico sin saber que terminaría usándolo para una tésis que podría beneficiar al mundo entero. Un ejemplo de giroscopio es el siguiente:
Los giroscopios como origen de un proyecto
Al estudiar los proyectos de basura espacial contemporáneos, se dio cuenta que ninguno utilizaba giroscopios como objeto para estabilizar la red que se encargaría de recoger la basura. Fue donde surgió la idea de iniciar el primer prototipo que utilizaría uno de estos aparatos, lo cual volvería la tarea de remover basura más exacta y precisa a diferencia de con otros proyectos.
“Ana Rebeca está trabajando en seguir desarrollando las tecnologías esenciales de guiado, navegación y control, así como métodos de encuentro y captura de basura espacial”, explica el profesor Díaz.
Las fases del proyecto consisten en la de diseño, la instrumentación y programación y por último la fase experimental. Actualmente acaba de terminar con la de diseño. Una vez terminada la fase de diseño, empezó con la instrumentación y con la programación del sistema. Pronto espera comenzar con la parte experimental.
Un proyecto con apoyo internacional
El proyecto ha recibido aportes internacionales desde Tokio y también del Consorcio Universitario de Ingeniería Espacial (UNISEC), gracias a la búsqueda de oportunidades que la alumna ha realizado.
La Universidad de Tokio se ha vuelto parte del proyecto a través de la ayuda prestada por el doctor Kojima en la parte de dinámica; pues el trabajo involucra varias ramas de la ingeniería, las cuales son: la dinámica, la electrónica y el modelo matemático y control.
Además, la ingeniera va a reuniones mensuales de Unicef Global para lograr el desarrollo de su proyecto. Unicef Global se encarga de realizar seminarios para pico satélites (satélites pequeños) donde Rebeca ha convivido con personas de la industria aeronáutica que han contribuido para el perfeccionamiento del proyecto.
Basura espacial, un problema serio
¿Limpieza espacial? Podría sonar raro para muchas personas. ¿Cómo habrá basura en el espacio si no hay personas que lo contaminen? Rebeca explica que, existen objetos que fueron lanzados al espacio que actualmente no cumplen ninguna función y se convierten en lo que conocemos como “basura espacial”.
Juan Díaz, profesor de Mecatrónica del campus Tampico, explica que:
“Los humanos han generado toneladas de residuos, entre ellos la "basura espacial", que es uno de los asuntos "más urgentes", según las diferentes Agencias Espaciales del Mundo, pues hay más de 25,000 objetos en órbitas terrestres de los cuáles sólo el 20% son funcionales."
Dado que el espacio no tiene fronteras, la basura espacial no le pertenece a ningún país, por lo que no existen organizaciones encargadas de su recolección. Mientras nadie limpia la basura, esta se sigue acumulando año tras año. Dicha situación afectaría los sistemas de satélites que nos ayudan en nuestro día a día.
“La llamada "basura espacial" es uno de los asuntos “más urgentes”, según las diferentes Agencias Espaciales del Mundo.” - Gabino Díaz.
Ana comentó que “Los proyectos se vuelven como si fueran tus hijos”. Por lo que espera continuar con el proyecto hasta ver una culminación efectiva de este al perfeccionarlo para llevarlo a la fase experimental.
La fase experimental conllevaría buscar más contactos en la rama de ingeniería y organizaciones internacionales para que patrocinen y se logre poner a prueba en el espacio.
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